El restaurante D’Amico Ristorante ubicado en Homero 418 colonia Polanco, se llevó a cabo una interesante cata de los vinos de la Bodega Raventós i Blanc.
Esta cata fue dirigida por Pepe Raventós, propietario de la bodega Raventós i Blanc, quien vino desde España para poder dar a conocer estos vinos.
Los vinos que se cataron fueron: Manuel Raventós 2002, Reserva Brut 2008, De Nit 2008
Posteriormente a la cata se sirvieron bocadillos especialmente preparados para la ocasión.
Raventós y Blanc es una Bodega que se centra en la elaboración de cava y vino blanco, más un par de tintos a los que están destinando muchas atenciones.
Elaboran sus vinos y cavas exclusivamente a partir de uvas procedentes de su finca e intentando mantener una gran proporción, el 85% por lo menos, de Xarel·lo, Parellada y Macaveu.
En esta cata se encontraban Vicky Guedes, Marcela Robin, Eduardo López-Guerrero, Silvia Herrera, Felipe González.
Aquí los detalles de cada uno de los vinos presentados:
Manuel Raventós 2002 por Ferran Centelles
Lleno de registros y de aromas, esta es la grandeza de este cava. Combina mucha complejidad y una sensación de que no es podrá acabar de enumerar la inmensa cantidad de perfumes, hecho que convierte a esta botella en algo muy especial.
El listado de aromas que encontramos empieza con una fruta de recuerdo maduro, toques de manzana al horno que se combinan con una sensación de cereal tostado. El ahumado, el recuerdo mediterráneo, la elegante salinidad y la piel de naranja también forman parte de la gran cantidad de registros aromáticos.
En boca tiene mucha precisión. Es fino, con una burbuja muy suave que sirve para conducir un paso lleno de aromas.
El final es intenso con un suave amargor que le aporta un elegante toque Mediterráneo. La sensación tostada, acaramelada y la complejidad se consiguen con la paciencia del reposo en la cava y con una excepcional calidad de uva; es el denominador común de todas las añadas del cava Manuel Raventós y su punto de unión con los grandes espumosos.
Reserva Brut 2008 por Ferran Centelles
El estilo, aquella identidad que define una bodega se ve reflejada en este cava. En la búsqueda de la nitidez y pureza se sitúa este espumoso de aroma cítrico, suave, donde sobresalen los recuerdos de fruta blanca y donde todos los elementos olfativos se encuentran en perfecto equilibrio.
La boca esta construida sobre el frescor, frescor sí, pero concentración también, un vino que combina firmeza y suavidad con una burbuja cremosa. Un final largo y muy limpio.
El estilo de la Bodega se manifiesta en este extraordinario cava.
De Nit 2008 por Ferran Centelles
Un color rosa tenue, pálido y elegante te atrapa con sensualidad. Un cava intrigante que pide una búsqueda aromática pausada. El primer aroma es limpio, puro caso cristalino, poco a poco se desprenden con sutilez aromas cítricos con recuerdos de fruta blanca fresca y un toque de cassís. La nariz también desprende cierta cremocidad que le aporta complejidad.
La sensación limpia y directa de la nariz cambia radicalmente en boca donde combina una textura suave, voluminosa y afrutada con un frescor complaciente y una burbuja fina. Conducido por un buen equilibrio este cava de largo recorrido se estira hasta acabar con unos recuerdos de fruta fresca muy agradables.
Un cava dinámico y elegante que te pide ser catado y recatado para descubrir todo su potencia y gozar de su textura llena de frescor y sensualidad.