El Superbowl y yo nacimos el mismo año con pocos días de diferencia. Desde entonces como niña hasta el día de hoy como adulta contemporánea (creo que ese el termino que hay que utilizar en los de mi generación) refunfuñaba cuando compartía la TV con mi papá (en aquel entonces nada que una TV por cuarto) había una y se compartía entre la familia.
Desde los Monday Night Football, posteriormente con el Dad, mi padrastro quien insistía llevarme a todos los partidos de los aquel entonces Houston Oilers al Astrodome, recién me dijeron que ni uno de los dos existe, y conforme escribo estas líneas me viene a la mente la fiesta que mis papás ofrecieron -muy a pesar y la sorpresa de mi mamá- para el equipo, sus esposas y su dueño, recuerdo un jugador en especial: Earl Campbell, su cuello era del diámetro de mi cintura y un Sr. Bum Adams que fumaba puro y usaba peluquín, el dueño!
Mamá no lo podía creer, era inaudito, y probablemente mi Dad durmió en las tumbonas de la alberca por unas semanas, pero con una sonrisa de oreja a oreja. Los años siguieron y con cada cumpleaños un nuevo superbowl, como post adolescente, esa época, en donde ya no se es puberto, pero uno se cree que por estar próximo a los veinte se come el mundo a bocados, tuve un novio/ pretendiente que me llevó a casa de algún familiar a ver el superbowl. Era el año de 1984, y yo estaba petrificada ante mi ignorancia del juego y del protocolo, posteriormente y gracias a mi adorado Erik Baeza terminamos mi papá, el Yeti (mi ex marido) and yours truly en casa del aquel entonces embajador de EUA en México Tony Garza.
Tener otro novio súper fanático de la NFL y oír sus gritos desde la sala de TV hasta el otro lado de la casa » noooo, dejen de jugar como nenas» era el eco de sus gritos, y ahora hoy aquí, unas semanas después de mi 46vo cumpleaños rumbo a ver en vivo y a todo color mi primer Supertazón , caray, creo que a mi edad se pueden empezar a romper algunas reglas y aprovechar los paradigmas de la vida, así que heme aquí, forrada en ropa térmica -lo mío, lo mío no es el frío- y son sombrero digno de Anna Karenina -el estilo nunca se pierde- aunque este afónica de tanto haber gritado, chiflado, esperando ansiosa cada jugada, independientemente de si fueran los Giants o los Patriotas, realmente no tenia preferencia, los equipos de papa siempre fueron los Greenbay packers y los steelers.
Ahora se que los Gigantes de Nueva York «se colaron» (9/7) al derrotar en desempates a los dos mejores equipos de la liga Greenbay (15/1) y a los San Francisco 49ers. Aquí estoy en el lado este de estadio Lucas Oil en Indianápolis, entre la yarda 50 a la 46 justo detrás de la banca de los Gigantes, mi hija Federica con quien chateo durante todo el partido, me apuesta ella Giants yo Patriotas! Va, bring it on…
Por fin entiendo lo que es un primero y diez, lo identifico con cada jugada, y veo como recorrer 10 yardas requiere de una agilidad física titánica! Mi corazón, a pesar de la apuesta con mi chaparita, esta con ambos equipos, desconozco el nombre, posiciones ni características de los jugadores salvo de los quarterbacks quienes siempre tienen fama de ser guapos y en comparación del resto de los otros jugadores parecen unas silfides: Tom Brady y Eli Manning (Ziggy, estas leyendo?)
El Lucas Oil Stadium es la casa de los Potros y se encuentra en el anexo de un enorme centro de conveciones no muy lejos del centro histórico de Indianápolis, cruzamos la Superbowl Village que abarca 3 cuadras antes de llegar al estadio y yo ante un mundo de aficionados soy la única lunática tomando apuntes desde mi Centerfield y luciendo collar de perlas, y digo centerfield! , otro amigo Federico, también esta aquí, nos texteamos, ¿en donde estás? Exactamente en lados opuestos! Checa mi boleto de VIP y me manda una foto de su pase de acceso, y le respondo, checa mi ubicación de Princesa: Top block 113 fila 5 o es a la inversa?
A la hora que cantan America The Beautiful pienso en mamá en sus años de internado en Filadelfia, pero cuando Kelly Clarkson junto con un coro de back up canta el himno nacional norteamericano me vuelvo en la más gringa (yeap, tres cuartos gringa) de todos los 68,000 aficionados… For the land of the free and the home of the brave! Chiflo fuera de mi!
Jamás me imaginé ni me visualicé sumergida en esta emoción, en el ambiente, la pasión! La intensidad de la afición y de los jugadores es impresionante y no me puedo mantener al margen, grito, chiflo como carretonera, princesa multitask, comento con mis compañeros y para el final del 1er cuarto, ya domino todo, casi todo, apuestas, voluntades y expectativas, yo en cambio soy cual es el termino? Una villamelón?
Es el segundo encuentro entre ambos equipos, en el 2008 ganando entonces por los Gigantes. Decido que le voy a los Patriotas, la afición en su mayoría le va a los Gigantes y en los tiempos fuera o corte para anuncios se oye New York y dos aplausos, al único patriota que me encontré fue un fanático pintado de azul y blanco, una muy política correcta Katy Perry imparcial luciendo el pelo azul y jugando con los colores de la bandera norteamericana.
Mientras los televidentes ven los muy anticipados anuncios comerciales, nosotros en el estadio escuchamos música, gracias a Dios por mis dos hijas y su infinita cultura en música pop, no se quienes son cantantes pero me se y bailo a cada melodía, mis compañeros de viaje y banca me denominan la mascota del grupo.
Tras dos intensos cuartos, la muy esperada Madonna, quien tiene 6 minutos para montar su foro, 12 para cantar, y 7 para desmontar hace su espectacular a la Cleopatra meet Marco Antonio Meet Gladiator, eso si, en trajes diseñados por Givenchy especialmente para la diva de 53 años, de la nada salen unos cuates con un afro digno de los Jackson…quienes son Fede? Le pregunto por chat a mi hija : lmfo, im sexy and i know it, luego una rapera Nikki no se quien y para terminar la presentación “Just like a prayer” con otro artista que no conozco,
Empieza el tercer cuarto, Cruz ya anotó y aprendí que cada vez que lo hace baila una mezcla de salsa con merengue y chachacha… Bradshaw está lastimado y el patriota Rob Gronkowski se integró finalmente al partido, el pequeño Martínez intercepta varios pases…Wow, cada tackle, cada infiltración, cada yarda corrida, los thumps de los encontronazos entre atletas se escuchan como costales de harina.
Algunos, no corrección, todos estas máquinas de atletas, son admirables en todos aspectos, son el doble sino el triple de mi, Kitget es petite. I could go cougar for Brady, solo 11 años de diferencia!
En el último cuarto los Patriotas a la ventaja 17 , YES, en una movida inesperada los Gigantes anotan la movida definitiva. El jugador se deja caer como osito panda? Queee! Me explican que es a propósito y que esta dejando pasar tiempo para dejar un minuto en el marcador sin oportunidad de que los Patriotas tengan oportunidad de hacer nada… Aun así en ese minuto los Patriotas dan su ultimo jalón, Brady (quien al igual de Montana tiene el mismo record de pases completados) lanza 3 pases sorprendentes, HailMary’s o Ave María, ahora si mi corazón es suyo… Pases incompletos y el marcador como todos sabemos queda 21 a 17, buuaaaa.
A continuación la entrega del premio Vince Lombardi – quien dijo «el ganar no es importante, es todo»- el cual es besado, tocado, una multitud le rinde culto y devoción como si fuera una reliquia.
Ya de regreso en mi hotel en Union Station (mi habitación es un vagón de tren) siento aún la adrenalina, la emoción la admiración de lo que acabo de sentir.
Superbowl LVII here I come!
De regreso a Mexico le llamo a papá, le digo: “ya entendí, bailo de emoción…” Ziggy viene a comer, trae su periódico de deportes para que le narre cada jugada, ahora soy reportera de fútbol americano.