Era una de las mujeres de Hugh Hefner, el magnate dueño de Playboy que supo conquistar su corazón hasta que contrajo matrimonio con el jugador de futbol americano Hank Baskett. Ahora, Kendra Wilkinson, antes una bomba sexual, admite que una buena vida con sexo es crucial para la felicidad de una pareja, pero piensa que la clave para poseer una unión armoniosa son el apoyo y la comprensión.
«El sexo es muy importante, pero sin lugar a dudas no diría que es lo es lo más importante. En cambio la comunicación sí que lo es. En pareja, siendo dos, hay que cambiar tanto personalmente como en pareja. Una persona no puede cambiar y la otra seguir como era, porque lo importante es evolucionar junto a la persona a la que amas. Si ese cambio no se produce, puedes llegar a perderte. Las personas atraviesan por muchos cambios y pasan por diferentes etapas. Se viven momentos duros, buenos y malos, pero se deben afrontar juntos», explicó la rubia a BANG Showbiz.
Sin embargo, la joven contó que a la hora de su actividad sexual junto con su marido, «ambos somos personas divertidas a las que no nos gusta vernos atrapados en el dormitorio. Somos espontáneos y no nos tomamos las cosas demasiado en serio, por ello no nos limitamos a estar en la habitación. ¡Nos gusta ir más allá! Lo hemos hecho un par de veces en el coche, pero no estamos tan locos como la gente se piensa. En realidad, creo que somos bastante más conservadores de lo que la gente se cree, simplemente nos gusta explorar un poco».
La rubia cambió mucho su parecer desde que se casó con su actual marido. Antes era una conejita ávida de tener sexo.