Para las fashionistas amantes de la firma de lujo ETRO, tenemos buenas noticias, la marca italiana ya instalada desde hace varios años en nuestro país, al fin trae ETRO Home.
Para la llegada de ETRO Home, será Casa Palacio en el Centro Comercial Anatara quien le de la bienvenida, además de la boutique de ETRO ubicada en Masaryk .
La colección tiene una inspiración en tonos marfil, crema y beige: tonos neutros que son utilizados para mezclarse con matices de colores brillantes, siempre con un toque bohemio. Los rojos clásicos y oro se suavizan logrando desafiar los colores fuertes; uno a la vez.
A continuación las inspiraciones de las diferentes colecciones.
Montgomery
Una nueva “cápsula” monocromática, que experimenta con matices grises, que recuerdan a las redes y estructuras del Art- Deco.
Los clásicos diseños de Etro son reescritos con un nuevo aspecto que llama la atención, en donde se envuelven tonos de hierro y acero, con un halo de color marfil, casi imperceptible.
Las sábanas en satín logran que esta colección sea elegante y actual a la vez. El Paisley en esta colección no tiene color, y se mezcla con los colores de las telas.
Marburg
Una metrópoli gris experimenta con colores contemporáneos. Colores fucsia, verde ácido y rojo se juntan con los estampados de Paisley para lograr un efecto de terciopelo.
Borlas con wash-effect o mantas crochet aparecen en colores básicos, pero el look Marburg gira en torno a los contrastes creados por los matices que recuerdan vagamente a los años cincuenta. Los tejidos gráficos y diseños geométricos están en sintonía con las vanguardias del mundo del arte, logrando un ambiente intelectual.
Darlington
Basado en el estilo inglés y la pasión por pescar y cazar. El estilo Oriental se ve reflejado en los tonos dorados, rojos y beiges que se mezclan con las pieles de tigre y leopardo.
Las pieles se mezclan con el Paisley. Telas como el cashmere, el terciopelo y la piel son usadas en tonos dorados y rojos para recordarnos un amanecer o una puesta de sol.
Chantilly
El más gentil de las colecciones de invierno, suaviza el escenario coloreando terciopelos, satines y jacquards en tonos pastel. El efecto transversal también se extiende entre lo masculino y lo femenino. Por otra parte, hay una mezcla de color lila y malva, o la opción de la aviación, azul y mostaza. Las pieles son en colores lisos, como los de las divas de los años 40, mientras que las mantas de cachemira presentan un diseño con rayas. Los cojines de seda con cashmere en paneles geométricos o en forma de abanico gráfico impreso guían el camino para el género, que es siempre universal.
Chambery
Establecido entre el siglo XVIII y los setenta, en medio de reminiscencias del lujo hippie y el jet-set, la mujer vive inmersa en medio de brocados en tonos vivos y un trenzado bohemio que es más sofisticado que nunca. Pianos, arpas y violines forman parte de los efectos découpé-appliqué de los cojines, en medio de violetas y verdes, fucsias y fresas.
Satenes y terciopelos encuentran a los estampados Paisley en tonos brillantes, los cuales tienen presencia en las sábanas. Mongolia teñida y pieles tricot recuerdan el lujo de viajar de los años setenta, todo esto se resume en el mosaico de las mantas y cojines en shantung de seda plisada, el exceso de bordado con guirnaldas de flores.