Carla Bruni está recelosa y desea cuidar absolutamente la intimidad de su hija. Ahora que la nueva integrante de la familia Bruni-Sarkozy está en casa, ayer al mediodía Carla Bruni abandonaba la clínica de la Muette con su hija Giulia en brazos.
La primera dama la protegió de los medios. El mandatario francés Nicolás Sarkozy había visitado la clínica donde estaba internada su mujer en tres ocasiones antes de viajar a Bruselas, donde tenía una reunión.
Ángela Merkel, la premier alemana, le regaló un osito de peluche a Sarkozy para su hija Giulia, un gesto de amistad en medio de las discrepancias de los dos dirigentes europeos sobre la forma de resolver la deuda en la zona euro.
Recordemos que la beba no es la primera hija de ambos. Sarkozy tiene otros tres hijos: Pierre, que nació en 1985, Jean, en 1986 y Louis, de 1997. En tanto, Carla Bruni es madre de un niño de 10 años, Aurélien, cuyo padre es el filósofo Raphaël Enthoven.