La firma zapatera Pedro García es sin duda una oda al buen gusto y a la tradición, una historia de éxito en un mundo donde los zapatos son piezas de pasión y alegría en la moda.
Zapateros Shoemakers. Así es como se consideran básicamente en Pedro García.
Actualmente, es la tercera generación de esta familia dedicada al calzado quien conduce la firma. Pero la historia de la saga se remonta al abuelo García, el primer Pedro, que inició el negocio en un agitado 1925, cuando estableció en Elda, Alicante, un taller de calzado de niño que a los tres años se convirtió en una fábrica de calzado masculino.
En 1954, el segundo Pedro García, su hijo, tomó las riendas del negocio, expandió la firma y la especializó en calzado para mujer. En 1965, inauguró una nueva fábrica de 4000 metros cuadrados y, en 1968, exportaba a los mercados más importantes, aparecía en Vogue o Harper’s Bazar.
El tercer Pedro junto a su hermana Mila, forman el actual eslabón generacional. Pedro se formó en el Ars Sutoria de Milano y en el Fashion Institute of Technology de New York y, desde 1992, año en que su padre fundó la nueva compañía con sus hijos como socios, se responsabiliza de la dirección artística de la marca, junto a su compañera Dale Dubovich.
Mila tiene a su cargo de la dirección empresarial, con la supervisión de su padre como Presidente del Consejo de Administración. Desde entonces han conseguido expandirse a todos los mercados mundiales e incluso ser un referente del segmento de lujo para el exigente mercado estadounidense.
Pedro García se encuentra en más de 1.000 puntos de venta seleccionados en todo el mundo. Entre ellos Bergdorf Goodman en Estados Unidos, Lane Crawford en Hong Kong, Tsum / Mercury en Rusia y Net-A-Porter (online) en Inglaterra.
Entre las famosas que usan esta firma de zapatos destacamos a Michelle Obama quien tiene en su guardarropa algunos pares de este diseñador.