El padre de la cantante Amy Winehouse está convencido de que su hija había superado hace tres años su adicción a las drogas y antes de su muerte no había bebido alcohol. Así, durante el entierro, Mitch Winehouse explicó que su hija no estaba deprimida.
La agencia de noticias PA publicó: «Los médicos dijeron que era imposible, pero ella lo consiguió. Intentó también controlar sus problemas con el alcohol y hacía tres semanas que era abstemia», añadió el padre de la cantante.
«En los últimos meses, había encontrado junto a su pareja Reg Traviss, un amor feliz y le alegraba pensar en un futuro con él» y, en el marco de su dolor de padre, sostuvo que «saber que ha fallecido feliz es algo que nos hace bien a todos», se consoló en la despedida de los restos de su hija. En un principio se especuló con la posibilidad de que la artista, que luchaba desde hace años contra su adicción a las drogas y el alcohol, hubiese fallecido a causa de una sobredosis.
Recordemos que Amy llevaba gran parte de su vida librando una batalla contra las adicciones que, según su padre, «estaba muy cerca de ganar».
A su vez, el padre de Winehouse anunció que parte de su fortuna será donada a una fundación que lucha contra las drogas, ya que en Gran Bretaña «es difícil acceder a una terapia para tratar los problemas de adicción» y a la familia le gustaría «contribuir a cambiar eso».