Barbra Streisand y James Brolin son unos apasionados de la arquitectura y su casa situada en Malibú es muestra de ello. La vivienda de la pareja está ambientada en los lejanos tiempos de la colonización de EEUU y la propia cantante y actriz se ha encargado personalmente de todo lo que se refiere a la decoración.
Barbra, una de las mujeres más ricas del mundo según Forbes, vive junto a su segundo esposo en una fabulosa propiedad en los acantilados de Malibú, California. Su mansión refleja el amor por las antigüedades y su atmósfera traslada a la época colonial en EEUU.
Uno de los varios edificios con los que cuenta la impresionante propiedad simula un granero típico del norte del estado de Nueva York. A su lado, otra de las edificaciones está inspirada en una antiguo molino. Y es que para la cantante es importante vivir con cosas que transmitan su propia historia.
En uno de los salones, destaca un retrato del primer presidente norteamericano, George Washington, mientras que la cocina ha sido decorada para simular una estancia de una antigua granja, aunque combinada con la última tecnología, según la revista Lecturas.
La actriz ha vuelto recientemente de un viaje por Europa que le ha servido de inspiración y que ha considerado más que satisfactorio. Para Barbra, en estos tiempos tan caóticos, la belleza es la fuerza y el motor para creer que todo es posible.