Sí, es una realidad que las famosas incursionen en mundo de las fragancias, muchas veces vendidas más que por un aroma por una identidad con la celebridad.
Es ya larga la lista de celebridades que además de actuar o cantar se lanzan a tener su propio perfume, muchas de ellas intervienen en las notas, otras en los empaques y otras en simplemente en salir a dar la cara por la fragancia que lleva su nombre.
Lo que es una realidad es que este mercado es cada vez más socorrido por las clientas que buscan aromas con nombres de famosas.
Aquí las últimas que han incursionado en el mercado de la perfumería y la mercadotecnia.
-Oler a “Mariah Carey” es oler a: una exuberante floral-oriental. El cálido y tentador malvavisco se entrelaza, evocando una sensación de comodidad, con corazón floral y femenino de flor viviente de Tiara de Tahití, envuelta en pétalos húmedos de Gardenia, evocando la fragante brisa de la Isla de Capri.
El alma de la fragancia, combina el Ámbar traslúcido con acentos especiados y amaderados de incienso Marroquí, formando un seductor acorde que simboliza la sensualidad, belleza y glamour de Mariah.
-Oler a Halle Berry es oler a higo y mimosa rosa. «Quise mezclar dos de mis fragancias favoritas, higo y mimosa, y ponerlas juntas en una hermosa botella con aire oriental», explicó la actriz, quien también comentó que ambas esencias eran su «sabor preferido» en estos momentos.
-Oler a Jennifer Ansiton es oler a sensualidad. Para este lanzamiento Aniston echo todas las carnes al asador, pues en la campaña se desnudo completamente. Se trata de Lolavie, una delicada combinación floral.
Se trata de un aroma fresco y natural, con un estilo que se refleja muy bien en la imagen de la fragancia. Por cierto, que el frasco es además de lo más elegante. Claro, que no podía ser de otra manera tratándose de Jennifer Aniston.
-Oler a Eva Longoria, esta es una de las últimas luminarias en lanzar su fragancia, de nombre “Eva” el perfume destila un aroma “sexy, fresco y único”. Para ello, la fragancia contiene esencias como la bergamota, el jazmín, la violeta, el almizcle, el sándalo y notas cítricas.