Los vinos blancos y rosados son el aliado perfecto para refrescar tu paladar esta temporada de calor
La primavera es una de las estaciones más esperadas del año, ya que marca el comienzo del buen tiempo y llega el final del clima frío del invierno. Con el aumento de la temperatura y la luz del Sol, muchas personas disfrutan realizar actividades al aire libre, salir con amigos o simplemente disfrutar en casa de una buena copa de vino.
Los vinos blancos y rosados son ligeros y frescos, lo que los convierte en una bebida perfecta para combatir el calor. Además, su acidez natural ayuda a refrescar el paladar y a limpiar el sabor de la boca, lo que los hace muy adecuados para beber al aire libre. Estos vinos también son una bebida ideal para acompañar comidas ligeras de primavera, como ensaladas, mariscos y platillos a la parrilla. Son versátiles y pueden combinarse con una amplia variedad de alimentos, lo que los hace perfectos para disfrutar en una comida al aire libre con amigos y familiares.
Te compartimos una selección de tres vinos blancos y rosados que son perfectos para los días soleados de esta temporada.
Un vino imperdible definitivamente es Trivento White Malbec, una increíble y refrescante innovación del mundo del vino que sorprenderá hasta los paladares más exigentes con sus notas aromáticas de durazno, manzana verde y cereza, con un final fresco y frutal. Es el perfecto acompañante de platillos fríos como una ensalada capresse o un delicioso sushi. Se recomienda enfriar a una temperatura de 8°C antes de servir.
Casillero del Diablo Devil’s Collection Rosé es un blend sin complicaciones que conquista por su marcada frescura y encanta por su ligereza desde un comienzo. Posee un balance perfecto entre acidez, mineralidad y delicadeza. Resulta ideal para ser bebido solo o acompañado con platos ligeros, como atún o salmón, quesos frescos como el de cabra y camembert. Se recomienda tomar a una temperatura de 6 u 8ºC.
Fresco desde un inicio, el Sauvignon Blanc de Reservado de Concha y Toro destaca por su tono amarillo claro con destellos verdosos de carácter frutal con notas como durazno, manzana y cítricos. En boca ligero, fresco y equilibrado. Resulta ideal para acompañar ensaladas de pollo, ceviche de pescado, pasta a la mantequilla y filete de pescado a las finas hierbas. Se recomienda tomar a una temperatura de 8 a 10ºC.
En resumen, la primavera es la época del año perfecta para disfrutar del aire libre y refrescarse con una copa de vino. No se necesita ser un experto en vinos o preparar una comida muy elaborada para descorchar y degustar un vino refrescante.
¡Así que levantemos nuestra copa y brindemos por la llegada de la primavera!