¿Has notado si existen momentos de calma en tu día, o constantemente escuchas ruidos, como el tráfico, música, las conversaciones y la televisión? Si no puedes recordar la última vez que estabas en completo silencio, es momento de considerar desconectarte de tu ritmo habitual de vida durante períodos de tiempo establecidos.
«Definitivamente hay un lugar y un valor para el silencio, y nuestras oportunidades en este mundo son tan limitadas debido al ruido que existe, que no llegamos a experimentar ese valor muy a menudo», comenta Les Blomberg, director de la Cámara de Compensación de Contaminación Acústica en Vermont.
En los últimos 100 años, el mundo se ha vuelto cada vez más ruidoso, con inventos como los automóviles, aviones, transporte público y motocicletas que crean un ruido que afecta a todos los que lo tienen al alcance del oído. Hoy en día, el ruido es en gran parte una distracción, pero hace miles de años, el ruido cumplía una función importante.
“El ruido fuerte era a menudo una advertencia de que algo andaba mal, ya fuera un bebé llorando o una persona gritando, provocaba una respuesta”, señala Blomberg. «El ruido fue una de las cosas que desencadenó nuestra respuesta de lucha o huida […] La mayor parte del ruido fuerte que experimentamos hoy es solo ruido […] sin embargo, nuestro cuerpo todavía responde de la misma manera».
Demasiado ruido no es saludable. La exposición al ruido puede tener efectos negativos en la salud. Un estudio encontró que los adultos mayores que viven más cerca de los aeropuertos, que están expuestos con frecuencia a los sonidos de despegues y aterrizajes, tienen una mayor probabilidad de ser hospitalizados por enfermedades cardíacas, que las personas que viven en áreas más tranquilas.
«Las personas que experimentan entornos ruidosos sufren todo tipo de problemas de salud, incluido un mayor riesgo de ataques cardíacos, pérdida de productividad, pérdida de sueño y pérdida de audición», añade Blomberg. «Se han realizado estudios que relacionan todo, desde la obesidad hasta la diabetes y un montón de otros factores de salud con el ruido».
Dicho esto, hay muchas cosas que puedes hacer incluso si vives en una zona más ruidosa. Si vives en una de estas áreas, será conveniente que te asegures de priorizar integrar tiempo de tranquilidad en tu día.
Pasar tiempo en un entorno más tranquilo puede tener beneficios para la salud mental. Los hospitales a menudo instituyen un «tiempo de tranquilidad» para ayudar a sus pacientes a descansar, pero las investigaciones han demostrado que un entorno de tiempo de tranquilidad también ayuda a reducir los niveles de estrés entre las enfermeras. Y los investigadores han descubierto que pasar tiempo en espacios verdes urbanos, que son más tranquilos que las calles de la ciudad, ayuda a las personas a reducir los niveles de estrés.
“El canto de los pájaros es definitivamente diferente a los mensajes de texto y los correos electrónicos, los teléfonos y los expertos en televisión solo hablando”, indica Amy Saltzman, Médico Holístico de California y autora de “A Still Quiet Place for Athletes”. «Los sonidos de la naturaleza se pueden utilizar para traernos de vuelta a nosotros mismos más fácil que los sonidos de la vida moderna diaria».
Encuentra formas de abrazar el silencio. El tiempo de tranquilidad te permite estar a solas con tus pensamientos y tomar un descanso de tu rutina agotadora. Es posible que te sientas más creativo, menos tenso y tengas mejor concentración y atención.
Elegir activamente el silencio sobre el ruido puede ser fortalecedor, calmante y revitalizante. Elegir mirar por la ventana mientras conduces, en lugar de escuchar música o hablar por teléfono, puede ayudarte a resolver un problema laboral o pensar en tus relaciones de una manera nueva. Intenta apreciar el sonido de una habitación silenciosa mientras preparas la cena en lugar de usar la televisión como ruido de fondo, o sal a caminar por la naturaleza sin escuchar música, ni podcasts. Puedes disfrutar del descanso.
“Creo que es realmente, profundamente útil, saludable y sanador para nuestros cuerpos, mentes y corazones tener un verdadero silencio”, finaliza Saltzman.
Aprovecha tu paz interior. Aprender a silenciar tu flujo de pensamientos internos puede proporcionarte un nuevo nivel de tranquilidad. “Cuando pienso en crear silencio, lo considero un paso más allá de la reducción del ruido”, comenta Blomberg. «Creas un silencio con un propósito».
La atención plena puede ayudarte a callar el ruido mental en tu mente sobre el pasado, el futuro y otras incógnitas. Es preferible tener un entorno externo tranquilo, pero no es necesario.
“Puede ser realmente útil poder encontrar nuestra quietud y tranquilidad en el interior, incluso cuando el exterior es un poco caótico”, explica Saltzman. «La forma más sencilla y fácil de comenzar es simplemente comprometerse a sentarse en silencio durante cinco minutos … y centrar tu atención en la sensación de respirar».
Practicar la atención plena con regularidad puede ayudarte a sentir que tu vida es más pacífica y tranquila. También puedes notar otros beneficios, para esto, es importante reconocer cuándo nuestro cuerpo necesita más atención. Fitbit te apoya a conocer el nivel de estrés en el que te encuentras. Ya que correlaciona toda tu información como frecuencia cardiaca, actividad electrodérmica, y sueño, y te guía para gestionar el impacto en tu bienestar ajustando tu nivel de actividad, descanso o practicando alguna de las sesiones de meditación que están disponibles desde las funciones de Fitbit Premium.
«Los datos realmente muestran que la atención plena disminuye el estrés, la ansiedad, la depresión y el insomnio», señala Saltzman. «También aumenta la resiliencia, el sentido de significado, el sentido de propósito».
Disfruta del ruido… a veces. Está bien sintonizarse con el ruido en algunas situaciones, siempre que encuentres formas de disfrutar del silencio en otras ocasiones. Los entrenamientos pueden ser un momento ideal para evitar el silencio en favor de la música.
«El ruido nos da una inyección de adrenalina que puede ser útil», menciona Blomberg. “Siempre que no se escuche a niveles que sean dañinos para tu audición, escucha música alta en una caminadora si es necesario. Pero no vivas toda tu vida como si estuvieras corriendo».
Empieza a identificar estos momentos en los que necesitas silencio, y apóyate de las sesiones de Mindfulness disponibles en la aplicación de Fitbit para lograr mejorar la respuesta de tu cuerpo ante el estrés y la salud mental. También, puedes llevar un registro de tus estados de ánimo, para ser consciente de tu bienestar emocional y de cómo cambia a lo largo del día. Juntas, tus reflexiones y tu puntuación de la gestión del estrés te dan una imagen holística de cómo gestionas el estrés.
Además, con unos dispositivos como Fitbit Sense y el nuevo Fitbit Luxe, podrás conocer tu puntuación de gestión del estrés. Donde verás un valor entre 1 y 100, en el que cuanto mayor sea el número significará que tus niveles físicos de estrés son menores. En definitiva, cuanto más alta la puntuación significa que mejor estarás controlando tu nivel de estrés.