Chocolate Abuelita, una tradición mexicana, presentó ante los medios de comunicación e invitados especiales vía electrónica la hermosa campaña y gran evento: “Unidos por amor a México“, una campaña para enaltecer el cacao, la cultura y las tradiciones mexicanas. Un aplauso para todos los organizadores ¡que belleza de evento¡
Elisa Queijeiro, historiadora fue la personalidad que Nestlé, muy atinadamente, eligió para dar la introducción a esta experiencia tan mexicana de tanto corazón.

“ He viajado, caminado y sentido las tierras de Tabasco y Chiapas para este proyecto. He compartir los secretos con las abuelas de estas tierras. El cacao planta sagrada, la bebida de los Dioses, el corazón para quién habla, moneda de los guerreros. Ixcacau, Diosa Maya del árbol del cacao y lo comparte con los hombres. La planta del cacao convivía con hombres y mujeres y era por su importancia moneda de cambio. Moctezuma tenía 80 mil cargas de cacao en sus arcas. Las mujeres jóvenes que amamantaban tomaban una taza de chocolate al día, por sus propiedades inmensas para la salud“, nos cuenta Eliza con su manera tan bonita de narrar.


“Es hermoso conocer el pasado, desde ahí encontramos sentido para lo que hacemos hoy, para el presente, por ello fui a conocer a los productores, valorar su trabajo sostenido y sustentable que hace NESTLE en estas tierras. Un homenaje a las tierras de Tabasco y Chiapas“, agrega Elisa.
“Los campos de cacao son hermosos y es donde las semillas se vuelven tesoro . Cacahua le llamaban en la antigüedad y para él hacían rituales de salud y fortaleza. Cuando recorres estas tierras te murmuran“, afirma Elisa con gran sentimiento. “La tierra da regalos que compartiremos en la mesa y para este proyecto la gran artista que supo comprender las entrañas de la tierra, fue Frida Kahlo, pintora que en su obra plasma los campos mexicanos, sus plantas, el cacao, sus flores y tradiciones mostrando en muchas de sus obras, una humedad que se intuye en las nervaduras de su obra, con verdes intensos como la tierra misma. Frida tenía un íntimo conocimiento de lo ancestral, de sus raíces. Eran culturas que tenían un tesoro en comun:el cacao. Chocoatl que abría el corazón. Hoy estas semillas regresan a nuestro hogar“.

Una oración citada de una antigua leyenda maya para promover una buena cosecha en tiempos de hambre dice:
Ixcanil, diosa de la semilla, escúchame.
Ixtoq, diosa de la lluvia, ayúdame.
Ixcacao, Diosa del Chocolate, mira mis lágrimas y ven en mi ayuda.

La sensación de logro o trascender, es el resultado de poner la mirada en una misión, en un objetivo y llevarlo de manera dirigente, así los sueños se vuelven realidad, y el cacao está presente en los sueños de los mexicanos.
Lo simbólico, el trabajo, el arte se vuelve tradición cuando saboreamos en una taza lo que en esencia somos.
Felicidades Nestlé por este bellísimo lanzamiento: “Unidos por amor a México“.