Hermosos Alfeñiques e increíbles figuras de cera escamada son parte de la artesanía local.
Cortazar, es un pueblo con Alma, afirma Ariel Corona, Presidente Municipal quién presenta su proyecto de marca ciudad dando a conocer las hermosas tradiciones que viven en esta población que cuenta con más de 100 mil habitantes.
“Es un orgullo poder mostrar los hermosos Alfeñiques y las magníficas figuras de cera escamada que brillan majestuosas en las festividades de Corpus Christi“. A su vez, Corona platica como la comida callejera en esta ciudad cuenta con una gran variedad de ricos platillos propios de la ciudad, como las gorditas y los tamales“.
La palabra alfeñique es de origen árabe y se usaba para llamar a la pasta de azúcar cocida y estirada en barras muy delgadas y retorcidas. Llamamos alfeñique a las figuras de azúcar harinosa o azúcar glas que se hacen especialmente para día de muertos.
Un tema apasionante que resuena sobre esta ciudad es la historia de que en Cortazar en voz del Arqueólogo Julio Jorge Celis Polanco, menciona Cortazar es el mítico Aztlán, “Lugar de las 7 cuevas de donde partieron los aztecas para fundar Tenochtitlan” lo cual se vincula con el hecho de que los primeros alfeñiques en México eran hechos los aztecas, quienes hacían figuras para sus ofrendas de amaranto y otras pastas comestibles, se dice que estos son los primeros alfeñiques que conocieron los habitantes de nuestro continente.
En México el alfeñique es un fenómeno sincrético en el cual se funden costumbres y técnicas indígenas heredadas de las culturas árabes.
Luego las monjas de los conventos relacionaban al alfeñique como figura tradicional de los meses de noviembre y diciembre en las celebraciones del día de muertos, así como en las posadas y la cena de navidad.
El 2 de noviembre, «día de muertos», son reconocidas las tradicionales calaveritas de azúcar.7 Los dulces más elaborados son pequeñas frutas y cráneos pero en Cortazar se elaboran hermosos borreguitos que hablan de abundancia, los cuales son los más vendidos durante todo el año en esta ciudad.
El dulce de alfeñique es un complejo objeto artístico que reúne en sí mismo al infinito espectro de aromas, texturas, sabores y colores que sintetizan el refinado gusto popular que se ha decantado a lo largo de la historia mexicana.
Por otro lado Ariel Corona, nos habla sobre las fabulosas figuras que iluminan las calles con fabulosas catedrales, cruces y figuras el día de Corpus Christi.
La tradición que comienza el jueves de Corpus Christi, es una presentación majestuosa de cirios pascuales y esculturas espectaculares de cera escamada, en donde se realizan procesiones en el jardín principal de la ciudad. Esta es una tradición sin igual que se realiza desde 1721, año en que se fundó este pueblo con la influencia de los frailes Franciscanos.
Esta tradición tiene dos fases. La primera, es una misa y la segunda, es la procesión diaria de la cera. La procesión que se realiza por la noche, es acompañada con bandas de viento y mariachis para anunciar la entrada de la cera, misma que fue preparada cuidadosamente por los mayordomos, quienes cuidan hasta el más mínimo de los detalles y buscan ser los mejores y con las esculturas más sorprendentes.
Con las obras de los artesanos de la región o “gremios”, los nueve días de cera (sí, son 9 días los que se desfila con las esculturas) se convierten en verdaderos espectáculos de obras de arte, por las variadas imágenes y figuras que desfilan por las calles, para después dejarlas como ofrendas en el Templo de San José.
Los cirios y artesanías de cera son representados como ofrenda, durante los días de la Octava de Corpus, como signo de agradecimiento a Dios por todos los favores recibidos a lo largo del año.
A la fecha esta tradición continua y es platicada orgullosamente por los cortazarenses. El desfile y las fiestas de Corpus Christi, es acompañado también por una feria para toda la familia en donde se disfruta y se divierte con juegos mecánicos, antojitos y presentaciones.