En el corazón de San Miguel de Allende te espera el Hotel Amparo, un pequeño pedazo de paraíso en la ciudad más encantadora del mundo.
Durante semanas escuché sobre el Hotel Amparo, “divino“ decían unos, “una joyita escondida“, comentaban otros, lo cual incrementaba mi curiosidad por ir a tan comentado lugar. Y así fue, una mañana comencé a caminar por las hermosas calles de San Miguel de Allende y pasando frente el fabuloso Templo de San Francisco doble a la izquierda y comencé a buscar en la calle de Mesones, el tan comentado lugar.
Y ahí, escondido a pocos pasos del bullicioso mercado, el Hotel Amparo, con su glamoroso interiorismo, hermosas piezas de arte, refinado ambiente y una casa increíble casa colonial, este hotel ofrece un remanso de paz para todos los que cruzan su puerta.
Este Small Luxury Hotel ofrece un lugar de calidez y alivio para los viajeros que buscan una alternativa fresca a los pilares tradicionales de lujo de la ciudad.
Las paredes del hotel Amparo, al igual que sus visitantes, son conocedores viajeros. La comodidad y tradición españolas de fin de siglo hacen un conjunto con el arte moderno y los textiles personalizados, las silenciosas alcobas blancas y las reliquias invaluables: una elegancia inteligente y vanguardista que se extiende por cada rincón a través de todo el mundo en refinamiento y amenidad.
Después de tomarme un café en su colorida y moderna cafetería que no rompe en lo absoluto con la herencia arquitectónica del lugar puse manos a la obra y dos semanas después mi esposo y su servidora llegamos a hospedarnos. Su estancia incluye desayuno hecho en casa, hora feliz en la terraza y la hora del postre por la noche. Hotel Amparo cuenta con una cocina de la más alta calidad así como la cafetería con servicio completo y un bar de vinos que ofrece una selección minuciosa de vinos poco comunes. Los huéspedes disfrutan de acceso las 24 horas al salón privado, un bar completamente equipado y servicios de conserjería sin igual capaces de exceder las expectativas de los huéspedes más exigentes, me gustó que en las habitaciones no hay TV, esta se encuentra en el salón privado para deleite no solo de 1 o 2 sino de los huéspedes para poder convivir y tener la oportunidad de conocerse. ¡Divine¡
Amparo significa “refugio”—el hotel invita a los huéspedes a elegir entre cinco suites íntimamente decoradas ubicadas alrededor de un patio interior privado. Cada rincón, cada tela, cada momento es considerado; una estancia nunca se parecerá a otra. La casa histórica fue remodelada a principios de 1900, y de nuevo, recientemente y minuciosamente dirigida por un destacado equipo de arquitectos y artesanos. Sus habitaciones, cada una diferente, es un remanso de paz y lujo.
La cocina del bar Margaret es una fusión de ingredientes locales, platos y estilos de cocina del sureste de los Estados Unidos, la costa del golfo mexicano y la herencia peruana del chef Marin. El menú puede ser compartido en forma de plato pequeño o disfrutado a la carta. El programa de vinos es un orgullo particular en Bar Margaret, con un gran énfasis en los pequeños productores europeos de vino de baja intervención. El menú de cócteles refleja la pasión del mezcólogo Gabriel Avila por los cócteles de tequila y mezcal con infusión de hierbas quién recibe en la terraza con una puesta en escena única.
Por su parte el Chef Kenten Marín, afable y amistoso, nacido en los EE. UU. y criado en Perú llegó a San Miguel por seguir una carrera culinaria inspirado por su abuela, cuya influencia prevalece en todos sus deliciosos platos como el puré de camote, que es una delicia, las verduras al grill, el pollo de granja que gana concursos y el puré de papá único, todo sencillo pero exquisito, y eso que no les he platicado de los postres los cuales están diseñados para terminarse hasta la última migaja.
No pueden perderse esta joya divina cuando visiten San Miguel de Allende, Capital Americana de la Cultura 2019.
Calle Mesones 3
San Miguel de Allende
+52 415 152 0819