Comienza una nueva vida con mayor conciencia de ti mismo, de tu vida y de tu cuerpo. Comer sin medida y subir de peso descontroladamente pueden ser las formas en que intentamos protegernos del miedo, la angustia, la inseguridad y la incertidumbre que nos provoca entregarnos completamente a nuestra pareja, de sentirnos vulnerables ante ella.
Ciudad de México, 26 de febrero (Masaryk TV).- Comiéndome mis emociones, de Editorial Diana, Adriana Esteva explora el vínculo que tiene el amor con nuestro cuerpo y, más específicamente, con el peso. Al relacionarlo con nuestras decisiones de pareja, podemos entender mejor el papel que ha desempeñado en cómo interactuamos y comprender por qué nos es tan difícil quitarlo de encima.
Este libro nace de las vivencias y del crecimiento personal y profesional de la autora. Tras reconocerse como una víctima de su peso, Adriana ofrece una empatía inigualable con todas aquellas personas que han transitado por los mismos caminos y buscan reencontrarse consigo mismas.
«El sobrepeso es un mensajero. No hay que rechazarlo, sino escucharlo. He estudiado mucho el tema, porque me fascina. Las personas que trato no tienen puesto el cartel de comedora compulsiva, de anoréxica, de bulímica, son seres humanos que desarrollaron una conducta para sobrevivir. Los kilos son un acto de amor hacia ti mismo cuando buscabas protegerte. Eso cambia todo. Ya no eres un enfermo que no tienes solución o alguien que se odiaba a sí mismo y por eso comías demás. Si me observo con ojos compasivos y entiendo que no soy un aparato “a arreglar” como quiere la sociedad, entenderé que si he tenido estos kilos es porque me han servido para algo. Ahí empieza el camino para darse cuenta de que ya no eres una persona indefensa y descubrir qué opciones tengo para que los kilos de más no sean siempre la respuesta para mi vida», dice Adriana, ella misma fundadora del taller teórico-vivencial Comiéndome mis emociones, impartido en varias ciudades de la República.