Una auténtica revolución en los paladares es lo que se ha propuesto conseguir Kensho, el sake que no proviene de oriente sino del Mediterráneo.
El icónico destilado japonés es el primero que se elabora en España, en la zona del río Ebro, utilizando el agua del manantial de Benassal, en la comarca del Alto Maestrazgo, en Castellón.
Los responsables de la producción de Kensho (en japonés, descubrir la naturaleza) son los ingenieros Meritxell Jardí y Humberto Conti, ambos amantes de la cultura nipona.
Kensho acaba de lanzar dos variedades diferentes de sake:
* Tokubetsu Junmai: en botella blanca, ofrece notas afrutadas con toques de manzana, melón, vainilla, naranja y cereal.
* Nigori: viene en botella negra, es de aspecto algo turbio y no tan afrutado como el Tokubetsu Junmai. Registra notas de cereales y debe ser mezclado antes de servir, para evitar que el arroz se pose en el fondo.
