Luego de más de una década termina de reconstruirse la zona afectada por los atentados del 11-S en Nueva York, con la próxima inauguración de una obra que ha concitado enormes expectativas.
Se trata del Oculus, la última obra del renombrado arquitecto español Santiago Calatrava, y que comenzara a construirse en 2004.
Con un presupuesto de 4 mil millones de dólares, el proyecto es una plaza urbana bajo tierra, y está compuesto, además, por un intercambiador de 34 mil metros cuadrados que conectará por tren la Gran Manzana con Nueva Jersey.
También dispondrá de once líneas de metro y la terminal de ferry de Battery Park, un gigantesco centro de transportes que abre sus puertas el próximo mes de marzo.
Por otra parte, la megaobra contendrá el centro comercial Westfield World Trade Center, y conforma una obra monumental hecha de acero, cristal y mármol blanco como punto de luz en el homenaje a todas aquellas personas que murieron en los atentados del 11-S.