El 19 de mayo de 1932 nació la escritora mexicana Elena Poniatowska, ganadora del Premio Cervantes de Literatura 2013 y una de las plumas más brillantes de la literatura de nuestro país.
Reconocida por libros como “Hasta no verte Jesús mío” y “La noche de Tlatelolco”, entre otros, y llamada “La Virtuosa de las Letras», ha recibido distinciones como el Premio Alfaguara 2001 por su novela “La piel del cielo” y la Legión de Honor por parte del gobierno de Francia, en 2004.
Para festejar su cumpleaños número 83, te compartimos algunas de sus frases más celebradas:
«Creo que uno nunca es totalmente feliz, nunca dura mucho, tampoco. Uno es feliz por ratitos como la canción que decía mi mamá de Cri-cri: «ahí en la fuente había un churrito se hacía grandote se hacía chiquito». Así es la felicidad, a veces grande, a veces no existe.»
«Si bien es cierto que un libro no va a cambiar un régimen dictatorial, a la larga resulta invaluable como parte de un cambio social, insensible de un día a otro, pero sensiblemente evidente de una década a la otra.»
«El deber de un intelectual es escribir lo mejor que pueda y hacer su tarea lo mejor que pueda y adquirir un compromiso con lo que se ha propuesto.»
«La escritura viene en la vida, de la observación de todos los días, de estar escuchando a los demás y de estar tirando mucho al cesto de la basura las cosas que no salen bien. Pero es un trabajo, una disciplina.»
«Los amores tempranos son los que esperan en las esquinas para ver pasar y después irse a soñar. Son amores que no se tocan pero que se evocan mucho.»
«Los libros son parte de la vida interior de cada ser humano. Tener un libro al lado de la cama es tener un amigo, un consejo y un apoyo seguros.»
«Creo que escribir es una especie de psicoanálisis. Porque, quiérase o no, se escribe lo que le sucede a uno, entonces en la mañana puede uno escribir lo que le sucedió en la noche o el día anterior. Y vaciarse de rencores, vaciarse de odios, decepciones y de traiciones también.»
«Con la práctica adquirimos la intuición de saber cuándo hemos hecho algo bien y entonces lo conservamos».
Las mujeres son las grandes olvidadas de la historia. Los libros son la mejor forma de rendirles homenaje.
«Las mujeres pueden hablar mejor de sí mismas que muchos escritores pero no creo que la escritura pueda ser femenina. La escritura es y la escritura tiene sentido como escritura. La buena escritura no tiene sexo, es simplemente buena.»
«Muchas veces la gente llora porque encuentran las cosas demasiado bellas. Lo que les hace llorar, no es el deseo de poseerlas, sino esa profunda melancolía que sentimos por todo lo que no es, por todo lo que no alcanza su plenitud. Es la tristeza del arroyo seco, ese caminito que se retuerce sin agua…Del túnel en construcción y nunca terminado, de las caras bonitas con dientes manchados…Es la tristeza de todo lo que no está completo.»
«El mejor libro es el que voy a hacer, porque si no ya no escribiría.»