Durante algunos meses y mientras Presidente MASARYK realizaba sus remodelaciones, la boutique de Max Mara ubicada en 318, también se encargó de hacer lo propio, pero a nivel mundial.
Llega un momento en el que las marcas de lujo comienzan a sumar y renovar experiencias de compra, sin duda algo que los clientes agradecen ampliamente.
Max Mara presente en las calles más lujosas del mundo se dio a la tarea de remodelar completamente sus boutiques, con el fin de ofrecer una experiencia de compra completa y con el ADN de la firma.
Para esta renovación llamó a Duccio Grassi, que posee un despacho de arquitectos muy reconocido.
“La presentación de las colecciones se logra a través de innovadores y tecnológicos conceptos de escaparatismo involucra al público en nuevas experiencias y le familiariza con el producto” explica el arquitecto creador del concepto, Duccio Grassi.
Grassi no es nuevo para la marca, y es que desde los 80s, este arquitecto italiano colabora para el grupo Max Mara, de hecho ha diseñado edificios en Soho, Nueva York, además de espacios comerciales y conceptos innovadores para MAX & Co, Pennyblack, Marina Rinaldi y IBLUES. !
Para la renovación en todas las tiendas de Max Mara (y la que le ha valido mención en revistas especializadas de arquitectura) Duccio Grassi muestra una caja que dialoga con el exterior, el nuevo espacio surge de una idea de arquitectura muy concreta, encajando perfectamente con el medio ambiente.
La boutique busca expresar con sus dimensiones, una experiencia multisensorial a la hora de las compras.
Max Mara Masaryk cuenta 200 m2 y la marca afirma que esta boutique representa la insignia de la marca en México. “Abrir esta estructura multiforme en el momento actual tiene un fuerte valor simbólico. Significa que el éxito no se puede separar de la valentía con el fin único de servir a los consumidores, tratando de anticiparse a sus deseos”, aseguró Ferruccio Tinghi, director de la marca en México.
Esta boutique ha sido concebida para crear un dinámico camino a través de las colecciones que encierra. El cliente sigue un recorrido rítmico enfocado en el arte de la sorpresa, acentuado por una novedosa estructura vertical. Líneas puras y materiales orgánicos contribuyen a crear un ambiente táctil, cálido y rico en contrastes.
El elemento estrella es la madera: roble tratado con ceniza originalmente obtenido del anterior estadio argentino del River Plate. Cristal retrobarnizado en platino aviva las paredes y el hierro bruñido construye las estructuras metálicas interiores. Desde el aparador principal una original caja de acero, cristal y maderas sutilmente iluminada dialoga con la calle.
La renovación de Masaryk da lugar a este nuevo espacio que sin duda se disfruta desde afuera, desde los inspiradores escaparates que son una parte fundamental de la comunicación de las marcas.
Por otra parte vale la pena apuntar la importancia de estas renovaciones a las que se someten las marcas y sus puntos de venta, que a pesar del e-commerce, siguen siendo un oasis de exclusividad y lujo.
MAX MARA 2015, MILÁN FASHION WEEK