Internet Explorer, el histórico sello de Microsof, quedará relegado a un segundo término para potenciar su nuevo navegador para el sistema operativo Windows 10.
El sustituto del Explorer está aún en fase de diseño en la sede de la compañía en Redmond, Washington, y según pudo saberse llevará el nombre provisional de Project Spartan.
El gigante informático, a través de Chris Capossela, su jefe de marketing, aseguró que están «buscando una nueva marca o nombre para nuestro navegador en Windows 10», y que el nuevo navegador será el que aparecerá en Windows 10 por defecto.
Sin embargo, la firma aclaró que Internet Explorer no desaparecerá del todo, y que mantendrá algunas versiones para garantizar compatibilidades con productos anteriores.
Microsoft lleva años soportando críticas por la imagen de Internet Explorer, al que los usuarios acusan de problemático y anticuado frente a nuevas opciones como el Chrome de Google, el Safari de Apple o el Firefox.