Ubicada a 90 kilómetos de Praga, la pequeña ciudad de Pilsen es famosa por su cerveza, además de sus múltiples atractivos naturales.
Este año tiene un motivo más para celebrar, ya que ha sido elegida junto con Mons (Bélgica) como Capital Europea de la Cultura 2015.
Para ello ha preparado una serie de actividades culturales y de entretenimiento, cuya temática será el circo, aunque no el que usaba animales sino el de los acróbatas.
El epicentro será la plaza central de Pilsen, donde destaca un colorido carrousel, además de otros puntos como el moderno Nuevo Teatro, creado luego de esta nominación.
Los actos ofrecerán también un vistoso desfile militar organizado con motivo del fin de la Segunda Guerra Mundial, y que contará con la presencia de fuerzas armadas de los Estados Unidos.
Para quienes asistan a las celebraciones, será un paseo imperdible la visita al Museo de la Cerveza, una antigua construcción donde maduraba la bebida, con pasajes subterráneos y un balneario para tomar baños de espuma en la casa Burgomaestre.
Su famosa cerveza tipo Pilsner, de tonos pálidos a brillantes y sabor ligeramente amargo, invitan a visitar también los bares donde se disfruta su sabor, muchos de ellos ubicados en la Plaza de la República.
Además, es obligatoria la visita a la cervecera donde se produce la famosa Pilsner Urquell, o la también reconocida Gambrinus.
Las bebidas se acompañan, generalmente, con chorizos asados, chicharrón con humus, carne de cerdo o tostadas de papa, además de quesos.
También habrá actividades culturales como operetas y obras de títeres, música clásica, exposiciones de artistas locales o visitas al Museo de las Marionetas o el Museo de los Fantasmas, para conocer algunas leyendas como la del angelito.