La boda de Carolina de Mónaco y Stéfano Casiraghi fue una de las más sonadas de su época. La princesa y el multimillonario eran la envidia de la realiza europea, y desbordaban felicidad.
Sin embargo, la tragedia tiñó la vida de la pareja, cuando Stéfano falleció luego de un accidente en las aguas del principado, cuando participaba de una competencia náutica en el Campeonato Mundial de off-shore.
El suceso marcó, también, la vida de Carlota, la segunda hija del matrimonio y nacida el 3 de agosto de 1986, y de sus dos hermanos: Andrea y Pierre.
Carlota era una niña que desbordaba belleza, y se trasladó junto a su madre a Saint Rémy, un pueblo ubicado en la Provenza, y regresó a Mónaco dos años después para estudiar en el colegio religioso Les Dames de Saint- Maur, completándolos con la carrera de filosofía en el Lycée François Couperin (Fontainebleau).
Como su padre, Carlota era aficionada a la hípica, y ser una figura pública no parecía molestarle, convirtiéndose en una mujer popular.
Cuatro relaciones sentimentales se le conocieron a la joven. La primera con Hubertus Herring-Frankensdorf, noble austriaco emparentado con el clan alemán de los Schaumburg-Lippe; la segunda con Félix Winckler, hijo de Antoine Winckler, un abogado asentado en Bruselas, y de Sylvie, coleccionista de arte.
La tercera fue la que mantuvo con el galerista de arte Alex Dellal, hijo de Guy Dellal, empresario multimillonario afincado en Londres y de Andrea, ex modelo brasileña.
Finalmente, su corazón se quedó con el actor francés de origen marroquí Gad Elmaleh, quien no fue aceptado al comienzo por ser 15 años mayor que ella, pero que durante el verano de 2012, donde Gad se sumó a las vacaciones de parte de la Familia Real monegasca en alta mar.
En septiembre de 2009, Carlota decide lanzar su propia revista de tendencias «Ever Manifesto», que se ha convertido en un auténtico icono del lujo y el estilo.
Apasionada de los caballos, participa frecuentemente en los torneos de equitación más prestigiosos del mundo. Habla francés, italiano, inglés y algo de alemán, aprendido durante el tiempo que su madre, Carolina de Mónaco, convivió con el aristocrático alemán Ernesto de Hannover.
En el 2009 Carlota fue elegida por la revista Vanity Fair como una de las mujeres más elegante del mundo, y un año después fue portada de la revista Vogue, retratada por el famoso fotógrafo Mario Testino.
Desde entonces fue imagen de Gucci en su línea de cosmética y de ropa de equitación, y ha participado de desfiles de la diseñadora Stella McCartney.
https://www.youtube.com/watch?v=y-HCU1wogpY
Hace algunas horas se confirmó que Carlota será la protagonista de la próxima campaña de la colección de joyas de Montblac.