Las constantes innovaciones tecnológicas han ido modificando y perfeccionando muchos de los deportes masivos, y el tenis no podía ser ajeno a ello.
Lo demuestra el Abierto Mexicano, el torneo más grande de América Latina, que acaba de confirmar que para la edición XXI del campeonato, además del cambio de superficie de arcilla a cancha dura, implementará el famoso «Ojo de halcón».
Este sistema permite una inmediata revisión de un punto dudoso, según el jugador afectado, por ejemplo para saber si un punto cayó dentro de la línea, cuando un jugador desafía la decisión de los jueces. En caso de tener la razón el afectado, el punto podría repetirse.
Las 10 cámaras que se instalarán, solamente en el estadio principal, se distribuirán de la siguiente manera: tres en la grada sur, tres más en la norte, dos en la oriente y dos en la poniente.
Los técnicos trabajan a partir de este viernes para instalar las cámaras, y desde el lunes los asistentes al Abierto Mexicano, que se disputará en Acapulco, podrán disfrutar de una tecnología que se usará por primera ocasión en México.
Raúl Zurutuza, director del torneo, indicó que son 10 las cámaras que se utilizarán para la revisión de cada punto. “Es todo un proceso, son 10 cámaras y esto funciona igual en todo el mundo. El juez de silla solicita la revisión a la oficina que está en la parte alta del estadio y el resultado se puede ver en las pantallas gigantes del estadio”.
La empresa encargada de suministrar la tecnología, será Hawk-Eye, misma que coloca el sistema en los torneos más importantes del circuito de la ATP.