Si su memoria le falla puede realizar algunos ejercicios para recuperarla, o bien recurrir a las múltiples fórmulas que la industria farmacéutica ofrece en el mercado.
Si ninguna de estas alternativas lo convencen, ¿qué tal una copita de champaña? Sí, leyó bien, recientes investigaciones realizadas en Gran Bretaña señalan que beber este líquido espumoso unas tres veces a la semana es bueno para mejorar la memoria.
Las uvas negras -explican los científicos- utilizadas para producir la champaña (Pinot Noir y Pinot Meunier, principalmente) contienen ácido fenólico, y es lo que produciría el efecto de mitigar los estragos de los años en la memoria.
Para las personas mayores de 40 años se recomienda beber 2 a 3 vasos de esta espumosa bebida y así prevenir un posible Alzheimer.
Jeremy Spencer, bioquímico de la Universidad Reading en Reino Unido y una de las cabezas visibles de esta novedosa investigación, declaró que este descubrimiento se debió a las pruebas realizadas a ratas, a las cuales les dieron una pequeña dosis del líquido mezclada con comida.
Luego, como una especie de desafío, las hicieron recorrer un laberinto para buscar más alimentos. Estos mismos animales, sin una gota de la bebida, encontraron la comida con un porcentaje de éxito del 50%. Sin embargo, las que recibieron su «dosis» de champaña tuvieron una puntuación del 70%, lo que significó una mejora en la memoria espacial.
Algunos expertos consideran que es muy pronto para realizar este tipo de afirmaciones, aunque no faltará quien se ponga, inmediatamente, a experimentar con el líquido espumoso.