Ante el sobrepeso de una de las cantantes más emblemáticas de este momento, Adele, Madonna salió a la defensa. Así, la reina del pop calificó de «ridículas» las declaraciones que recientemente hizo el diseñador Karl Lagerfeld sobre el sobrepeso de la cantante inglesa, y aseguró que las medidas de la joven son totalmente irrelevantes.
«Me parece horrible. Es la cosa más ridícula que he oído en mi vida. Odio cuando se critica a alguien sin ninguna razón aparente. Adele es una artista brillante y su peso nada tiene que ver con su valía», afirmó la diva en el diario The Sun.
De esta forma, la cantante también hizo referencia a la muerte de las cantantes Amy Winehouse y Whitney Houston, y admitió que todavía no puede asimilar cómo el alcohol y las drogas han acabado con tanto talento.
Tal es la angustia de la Reina del Pop, que consideró que la magnitud de la pérdida no se puede expresar con palabras y que, en lugar de lamentarse, hay que evitar que este tipo de tragedias se repitan.