Inauguró otra edición de la mayor exposición de aviones del mundo en Francia. La París Air Show es la exposición más importante del sector y el lugar elegido por toda la industria aeroespacial para mostrar sus últimas novedades.
Tanto Boeing como Airbus, presentaron sus aeronaves con lo último de tecnología. Boeing estrenó oficialmente su 747-800 Intercontinental, destinado a competir contra el A380 de Airbus, el avión más grande del mundo. Ambos superan los 14 mil km de autonomía. Así se convierten en ideales para viajar a cualquier lugar del mundo y en tarifas más baratas para los pasajeros.
Asimismo la lucha entre estos dos colosos ha quedado ensombrecida por los denominados nuevos jugadores provenientes de países emergentes. Los nuevos competidores del sector: Comac (China), Embraer (Brasil), Bombardier (Canadá) y UAC (Rusia). Jim Albaugh, máximo responsable de la rama de aviación civil de Boeing, ha sido categórico: “Los días del duopolio han terminado”.
En paralelo, estos días se ha certificado la recuperación de la demanda y la creciente importancia de los combustibles ecológicos.
Una de las novedades más sobresalientes fue un prototipo de un nuevo tipo de aeronave pequeña presentado por la compañía austríaca IAT21e, el “D-Dalus”, diseñado para despegar de forma vertical, sin alas ni rotores, que puede volar en cualquier posición y girar en todos los sentidos a velocidades de 2200 rpm.