En la constante búsqueda de explorar y expandir sus horizontes creativos, Tiffany & Co. se complace en presentar el reloj Bird on a Rock Legacy de Jean Schlumberger by Tiffany. Esta colección de deslumbrantes piezas contemporáneas refleja los 188 años de legado de la Casa en diseño, artesanía y maestría en gemas, que reinterpreta el emblemático broche Bird on a Rock de Jean Schlumberger. Homenaje a un ícono Jean Schlumberger es reconocido como uno de los más grandes diseñadores de joyería de todos los tiempos. Fue una de las figuras más influyentes de su época y dedicó más de tres décadas a diseñar para Tiffany & Co., desde 1956 hasta 1987. Como artista autodidacta y apasionado por el mundo natural, reinterpretó pájaros, animales, peces y flores con ingenio e imaginación sin límites en diseños que dieron vida a creaciones fantásticas y surrealistas. Innovadoras e infusionadas con joie de vivre, las piezas de Jean Schlumbergerhan sido reconocidas como íconos del diseño de joyería del siglo XX, entre ellas el broche Bird on a Rock. Diseñado en 1965, este broche presenta un pájaro engastado con diamantes sobre una gema de color de gran tamaño. Fiel al diseño original en cada detalle, el icónico broche se reinterpreta en miniatura sobre la carátula del reloj Bird on a Rock Legacy. Al frente, se sujeta con una garra de doble punta, sutilmente texturizada para asemejarse a las garras de un pájaro, mientras que la carátula de nácar blanco está grabada con un delicado motivo floral inspirado en los patrones encontrados en la casa de Schlumberger en la isla caribeña de Guadalupe. En el reverso, los artesanos tallaron una abertura precisa con un lente de aumento integrado, pensado para revelar la belleza oculta del reverso de la gema—un detalle que solo un joyero buscaría destacar. El realce que rodea la carátula está engastado con diamantes, lo que acentúa el brillo del nácar. En celebración del legado y la reconocida maestría de Tiffany & Co. en gemas, el reloj Bird on a Rock Legacy se presenta en tres versiones: con una morganita ovalada de 1.45 quilates, una tanzanita corte cojín de 2.72 quilates o una aguamarina corte esmeralda de 2.1 quilates. |
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Un legado de descubrimiento El legado de descubrimiento de Tiffany comenzó con la pasión de Charles Lewis Tiffany por las gemas excepcionales, lo que llevó a la introducción de piedras nunca antes vistas y consolidó a la Casa como una joyería de renombre mundial. Este espíritu de innovación continuó con el Dr. George Frederick Kunz, gemólogo en jefe de Tiffany de 1879 a 1932. Reconocido como el primer gemólogo de América y uno de los mineralogistas más destacados de su época, Kunzdesempeñó un papel fundamental en la evolución del mundo de la gemología. Entre sus numerosas contribuciones, la morganita ocupa un lugar especial. Valorada por su tonalidad rosada con matices durazno, esta variedad de berilo fue descubierta en Madagascar en 1910. Más tarde ese mismo año, durante una sesión de la Academia de Ciencias de Nueva York, Kunz propuso nombrarla “morganita” en honor a su amigo y patrón J.P. Morgan, y así reconocer su apoyo a las artes y las ciencias. El legado gemológico de Tiffany & Co. es tan vibrante hoy como lo fue con el descubrimiento de la tanzanita. Esta gema fue hallada cerca del Monte Kilimanjaro, en Tanzania, África, de dónde viene su nombre, y en 1968, Tiffany & Co. se convirtió en la primera Casa en incorporar esta impactante gema en joyería. Aún altamente valorada en la actualidad, la tanzanita se distingue por su tono azul aterciopelado con destellos violetas. |
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Artesanía excepcional El reloj Bird on a Rock Legacy refleja la maestría de Tiffany & Co. en joyería y engaste de gemas. Para dar forma al emblemático motivo de la Casa, un artesano esculpe a mano el pájaro en oro de 18 quilates, engastándolo con 119 diamantes y un zafiro rosa en el ojo, en un proceso que toma 24 horas de trabajo. Distintivo de todos los relojes Bird on a Rock, la caja de 36 mm presenta diamantes engastados con la técnica snow-set. Este método consiste en engastar diamantes redondos de distintos tamaños para crear una superficie luminosa y reflectante, con muy poco metal a la vista. Se trata de una técnica que exige un alto nivel de precisión; el engaste de la caja requiere cerca de 55 horas de trabajo. El reloj Bird on a Rock Legacy está engastado con un total de 587 diamantes (3.6 quilates en total). Los 309 diamantes de la caja se complementan con 116 diamantes en el bisel y el realce de la carátula. Un delicado rocío de diamantes acentúa el grabado en forma de rayo solar en el reverso, y la icónica hebilla en forma de T que sujeta la correa de lagarto está engastada con 43 diamantes redondos brillantes. En su reverso, el reloj Bird on a Rock Legacy ofrece una sorpresa visual: el reverso de la gema de color se aprecia a través de una lupa, alineada con precisión en la abertura de la carátula. Como todos los relojes Bird on a Rock de Jean Schlumberger by Tiffany, el fondo de la caja está grabado con un motivo en forma de rayo solar, inspirado en el broche Floral Arrows del diseñador. Al centro del grabado se encuentra un discreto botón que permite ajustar la hora. Fiel a la visión relojera de Tiffany & Co., el reloj Bird on a Rock Legacy trasciende su función práctica para convertirse en un objeto de belleza y asombro. |
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