Los aceites perfumados de lujo rinden homenaje al arte de la elaboración de fragancias finas y duraderas para ser usadas en todo el mundo; se trata de los Attars, herencia de compuestos aromáticos de civilizaciones perdidas, emperadores y califas y que hoy son representados por la marca Amouage.
Estas fragancias que forman parte de la vida cotidiana de personas indias y árabes, se conocen en el mundo entero y son perfumados sin alcohol creadas en Sultanato de Omán, un país localizado al occidente de Asia; y que hoy se han convertido en una reliquia para obsequiar como lo hacían en el pasado: como auténticos rituales.
Los Nuevos Attars Amouage
Metamórficos, los Attars nunca dejaron de evolucionar y sí han sido capaces de aprovechar la belleza de cada civilización, por lo que hoy se presentan como los Nuevos Attars Amouage: una oda a la forma de perfume más antigua conocida por la humanidad.
A través de ellos, Amouage pretende hacer un homenaje a la belleza, nobleza y riqueza de los imperios que dieron al perfume su primera época dorada. Sus seis Attars reúnen la técnica y la olfativa, para dar nacimiento a una nueva generación de perfumes.
La creación de estos Attars ha sido posible gracias al ritual del “layering”, un arte en la perfumería árabe que consiste en combinar varios Attars y fragancias para crear una estela compleja y única cada día, sublimando el aroma principal.