- Se encarga de ser una barrera física, protección inmunológica, aislante térmico
- Su pH debe oscilar entre los 4.5 y 5.5, por lo que alterarlo podría ocasionar afecciones
Al igual que la piel de nuestro cuerpo, la de la cabeza se encarga de ser una barrera física, protección inmunológica, aislante térmico, entre otras. A pesar de estar formada por tejidos suaves es una capa exterior continúa, elástica y resistente; sin embargo, muchas veces no se le dedica los cuidados necesarios e ignoramos que la estamos afectando; sin embargo, lo notamos cuando aparecen signos como descamaciones, resequedad, ardor, picazón, entre otros.
Este tipo de condiciones no deberían tolerarse, sino tratarse de inmediato para mejorar la salud de la piel cabelluda y es cuando comenzamos a aplicar un sinfín de productos que nos prometen dar solución a lo que estamos pidiendo; sin embargo, no todos éstos pueden ayudar a controlar los malestares, al contrario, pueden agravarlos, por lo que debemos tomar en cuenta algunas cuestiones antes de cualquier contacto.
Una de las primeras cosas a tomar en cuenta es que el pH del producto capilar debe oscilar entre los 4.5 y 5.5, por lo que alterarlo podría ocasionar afecciones como caspa o dermatitis seborreica, que de acuerdo con la Federación Mexicana de Dermatología son de lo más común.
Lo ideal sería prevenirlo con productos que no alteren esta acidez nata y que incluyan ingredientes naturales como extracto de avena, aloe vera, keratina, como la fórmula del shampoo capilar de Sopharma pH5, que además de limpiar, hidrata y suaviza tanto la piel cabelluda como el cabello.
Al cuidar nuestra piel cabelluda también está relacionada la aplicación de nuestros productos de limpieza:
- Moja tu cabello de enfrente hacia atrás de forma suave
- Aplica el shampoo y masajea los lados de la cabeza, en la parte de arriba y la parte baja de la nuca, para que se active la circulación. NUNCA rasques o presiones demasiado fuerte.
- Enjuaga de forma suave y de adelante hacia atrás. Recuerda no exponerlo a una temperatura muy elevada, lo ideal es que sea tibia y después con un poco de agua fría para que se cierren los poros, esto aportará brillo al cabello.
Nuestra piel cabelluda no es una parte muerta, por lo que requiere que le dediquemos un tiempo y evitemos maltratarla.