Google no cesa en su empeño por alcanzar las más diversas áreas, y su última incursión es en el mundo de los automóviles, dotando de sensores y computadoras a modelos de Lexus y Prius de Toyota.
Los diseños tienen la particularidad de no poseer volante, ni acelerador, ni freno, ya que un software y los sensores son los encargados de realizar todo el trabajo.
Chris Urmson, director del proyecto de automóviles autónomos, dijo que «el coche no usará volante, solamente botones de marcha y alto; será de dos asientos, aunque no viajará con mucha velocidad ya que la máxima será de 40 kilómetros por hora».
Por el momento, el auto no estará disponible para la venta al público, esperándose que el próximo año sean unos cien los prototipos que recorran las carreteras.
Google aclaró que no va a introducirse en la fabricación de automóviles, sino que trabajará en colaboración con otras compañías.
En una conferencia, el cofundador de Google, Sergey Brin, aseguró que conducir el prototipo le «recuerda un poco el viaje en una silla de esquí; un sentido de soledad que es muy disfrutable».