Hace unos días el Museo Arocena de Torreón, Coahuila abrió sus puertas para recibir una exposición individual de Fernando Botero, Testimonios de la barbarie, que consta de 25 óleos, 36 dibujos y seis acuarelas.
Esta exposición, que se ha presentado ya en varios países, aborda con potencia expresiva el tema de la violencia y su demoledor impacto en la sociedad y los individuos. Estas extraordinarias obras transforman el dolor en símbolo de resistencia, propiciando una necesaria reflexión sobre la dignidad humana y la necesidad de un cambio profundo que lleve hacia la estabilidad y la concordia.
El tema de la violencia en su obra tiene algunos antecedentes. En la década de 1960 realizó un mural para el Banco Central Hipotecario, Masacre de los inocentes y El secuestro, en donde hay una alusión a la violencia de mediados de siglo XX. En 1973, a la manera de una naturaleza muerta, pintó Guerra, en la que amontonó militares, sacerdotes, mujeres, niños como si se tratara de un campo de batalla. También mostró un interés por extraer historias de los periódicos, como es el caso de los cuadros Las noches del doctor Mata (1963), Teresita la descuartizada (1963) -hechos comentados ampliamente por entregas en la página roja de El Tiempo-, y El asesinato de Rosa Calderón (1970).
Fernando Botero Angulo (Medellín, 19 de abril de 1932) es un pintor, escultor y dibujante colombiano. Ícono universal del arte, su extensa obra es reconocida por niños y adultos de todas partes por igual. Es considerado el artista vivo originario de América Latina más reconocido y cotizado del mundo.
La obra de su autoría lleva impreso un original estilo figurativo neorrenacentista contemporáneo, denominado por algunos como “Boterismo”, el cual le da una identidad inconfundible y conmovedora a las mismas, y se caracteriza por la interpretación que da el artista a diversas temáticas universales con una volumetría exaltada.
Museo Arocena de Torreón
Calle Cepeda 354 Sur, entre Juárez e Hidalgo. Centro Histórico, Torreón, Coahuila, México.