En septiembre de 2012, Bernard Arnault, el hombre más rico de Francia, solicitó la nacionalidad belga, después de que el presidente galo, François Hollande, defendiera elevar al 75% el impuesto a las grandes fortunas superiores al millón de euros.
Sin embargo, la Fiscalía de Bruselas rechazó la petición del empresario para obtener la nacionalidad belga, según información del diario flamenco «De Morgen».
Los motivos por los que la solicitud de Bernard Arnault fue rechazada son los siguientes:
-Arnault no ha podido demostrar haber tenido su residencia principal en Bélgica durante tres años, requisito fundamental para obtener la ciudadanía belga.
-El tribunal tiene en cuenta la investigación abierta por la justicia de Bélgica para averiguar si varias empresas y fundaciones creadas en este país por Arnault se han beneficiado de ventajas fiscales para aumentar su capital.
Esta no es la primera vez que rechazan al empresario galo, que preside el grupo LVMH -propietario, entre otros, de Louis Vuitton o de Christian Dior-, la Oficina de Extranjería belga ya le había negado la nacionalidad, alegando que no reunía los requisitos necesarios para ello.