A 10 minutos de Bilbao, en Larrabetzu, se localiza el restaurante Azurmendi, que se encuentra situado en la ladera de una colina de viñedos autóctonos. Además, este espacio gastronómico, desde el jueves 22 de noviembre, es uno de los siete restaurantes españoles con tres estrellas Michelin.
El chef vasco Eneko Atxa (Amorebieta, Vizcaya, 1977), en 2005 tras pasar por varios restaurantes decidió abrir su propio establecimiento. Su currícula es récord, ya que en 2007, obtuvo la primera estrella y la segunda llegó en 2010 y ahora ya cuenta con su tercera.
Atxa además de la gran cocina que ofrece quería contar con el espacio perfecto para integrar al 100% su cocina en su entorno. Por eso, el pasado febrero inauguró su nueva sede. Nada más llegar, impacta el grandioso edificio proyectado por la arquitecta Naia Eguino, con piedra, madera y hierro, con criterios de arquitectura sostenible y pautas de ‘green building’. Istalaciones fotovoltaicas y geotermia (energía captada del subsuelo a través de 18 perforaciones); reciclaje de agua de lluvia y una huerta exterior donde crece una colección de 36 productos de 36 proveedores.
El área donde se ubica el espacio gastronómico está organizada a doble altura. Se destaca la decoración con obras de artistas vascos contemporáneos. Cuando el cliente arriba al restaurante, el chef lo acompaña y la primera parada es el Centro de Investigación del Producto, invernadero con producción monitorizada electrónicamente donde se le ofrece el primer bocado. La siguiente parada es el jardín interior vegetal y mineral, en el que llega una cesta de picnic con aperitivos como el Cacahuate mimético o la Infusión fría de tomate y albahaca.
Ya después de estas primeras paradas, toca el turno de elegir entre dos menús: Adarrak (Ramas), con 11 platos, por un precio de 120 euros (sin IVA, ni bebidas); o Erroak (Raíces), con ocho platos, por 100 euros.
Atxa combina una apuesta por la gastronomía del territorio, que califica como “cocina identitaria”, con un dominio de las técnicas de vanguardia y una gran creatividad. Ejemplos de sus en platos; los Raviolis de vaca de Betizu, envueltos en pan de maíz y jugo de legumbres; la Caricia de mar, con ostra, salicornia, algas y ortiguilla; Miel, un postre presentado sobre un panal; o, en otoño, las Castañas al sarmiento de sus viñedos.
Cuenta con una prodigiosa cava de vinos. El espacio cuenta con 12 mesas y vistas a la montaña vizcaína. No olvidarse de probar su increíble oferta de panes, como el maíz de Mungia o el de leche del caserío del productor Juan Zabala, elaborados en Azurmendi. Existe la opción de añadir una selección de quesos vascos con guarniciones y pan de mantequilla. El restaurante ofrece también un espacio para eventos y el local Prêtàporter, con un menú por 36 euros que cambia cada día.
Más info: Azurmendi. Barrio Leguina s/n, Larrabetzu (Vizcaya). www.azurmendi.biz