Los desamparados y jubilados de escasos recursos de la ciudad itaiana de Milán disfrutarán este año de un regalo de Navidad: caviar de beluga confiscado a traficantes.
La policía italiana confiscó unos 40 kilos del lujoso manjar, valorado en 400.000 euros, a dos hombres que el mes pasado lo introdujeron de contrabando en el país desde Polonia para venderlo en las tiendas de Milán y el resto de la opulenta región de Lombardía.
El jefe de la policía forestal de la zona que llevó a cabo la redada mantuvo el caviar en refrigeradores durante varias semanas, pero se dio cuenta de que pronto comenzaría a echarse a perder.
Una pequeña cantidad de los huevos de esturión fue conservada para análisis adicionales, mientras el resto fue enviado a asociaciones voluntarias, cocinas de caridad y hogares de ancianos.