La fusión de las culturas china, india, malaya y europea se refleja en una gran variedad de platos audaces y exquisitos que se pueden probar en los típicos mercados o en los mejores restaurantes de Singapur.
Singapur, una exitosa ciudad-estado, enclavada entre Malasia e Indonesia, a lo largo de su historia tuvo una muy variada influencia cultural, proveniente de todos aquellos lugares que rodean a la isla donde se encuentra.
Estas fusiones culturales, ayudaron a crear la atmosfera supra-internacional de Singapur, influenciando la vida cotidiana de sus casi cinco millones de habitantes.
La gastronomía es en uno de los ámbitos donde mejor se refleja la combinación de culturas, con platos chinos como el “bak kut teh” (sopa de costillas de cerdo intensamente condimentada con semillas de hinojo y clavo de olor) que comparten la oferta culinaria con platos de influencia malaya como el “laksa” (sopa de fideos con curry y leche de coco).
A la hora de probar estos únicos platos el viajero tiene varias opciones, se puede empezar por los antiguos mercados ambulantes, denominados los “hawkers “, que es la manera más tradicional de disfrutar de la gastronomía en Singapur, o a través de otras alternativas más elegantes en los restaurantes de lujo Iggy´s y Jaan Par André. Ambos dentro de la lista de los 50 mejores restaurantes del mundo, en las posiciones 28 y 39 respectivamente.