Una de las parejas más controvertidas de Hollywood ha decidido llevar a fin la relación que más de cinco años los tuvo unidos y en el ojo del huracán.
Al menos así lo confirma en periódico News of the World quien ha confirmado la ruptura definitiva de la pareja.
Los rumores todo el tiempo estuvieron en el aire, pero según el diario británico , la pareja habría firmado un millonario acuerdo de separación .
Los padres han optado por una custodia compartida, aunque los hijos vivirán en casa de la actriz. Según añade el diario The Times, Brad tendrá acceso total a sus hijos biológicos Shiloh y a los gemelos Knox y Vivienne, así como a los tres adoptados, Maddox, Zahara y Pax.
Los seis pequeños vivirán con su madre, probablemente en el Château Miraval que la pareja posee en Francia, mientras Brad se quedará con la mansión que compraron en Nueva Orleans.
En cuanto a la enorme fortuna que la pareja posee en común, que la revista Forbes estima en unos 140 millones de euros, se dividirá a partes iguales.