En el Mes del Orgullo LGBTIQA+, Platanomelón México quiere visibilizar una inquietante realidad sobre la falta de estudios científicos rigurosos y representativos de la salud sexual, el bienestar y las necesidades específicas de la comunidad LGBTIQA+ y las consecuencias que esto tiene en la salud mental en un colectivo frecuentemente invisibilizada. Platanomelón México considera que la falta de representatividad genera desinformación que se traduce en problemas de salud mental.

Como marca comprometida con la educación sexual integral, el bienestar y la inclusión se preocupa y ocupa que la investigación científica siga centrada en parámetros heterosexuales dejando fuera a muchas personas que no se ajustan a estos. La falta de investigaciones específicas perpetúa mitos y estigmas sobre la sexualidad no heterosexual.
Estudios recientes muestran que la comunidad LGBTIQA+ está profundamente subrepresentada en la investigación científica, específicamente en temas relacionados con la salud y salud mental. Dicha invisibilidad genera desinformación que se traduce en exclusión, malos diagnósticos, atención deficiente y graves consecuencias para el bienestar emocional y psicológico de millones de personas.

Investigaciones indican por ejemplo, que tan sólo 8 de 2,553 artículos científicos revisados abordan específicamente las necesidades de salud de personas LGBTIQA+ y que las tasas de depresión en estudiantes LGBTIQA+ son tres veces más altas que en sus pares heterosexuales cisgénero. Además de que la falta de estudios científicos particularmente sobre identidades como la asexualidad, arromanticismo, bisexualidad o pansexualidad implica en sí, una exclusión dentro de la misma comunidad LGBTIQA+.
Así, las orientaciones de las personas asexuales y arrománticas: siguen sin ser comprendidas ni consideradas. En el caso de las personas bisexuales y pansexuales, enfrentan bifobia dentro y fuera de la comunidad, por lo que requieren investigación sobre sus procesos de identidad y salud mental. También gran parte de las pocas investigaciones que existen se centran en personas jóvenes de la comunidad, dejando de lado realidades relacionadas con el envejecimiento, la atención médica, apoyo social, relaciones a largo plazo o el aislamiento.
Si bien, estudios señalan que las redes sociales pueden fungir como espacios seguros y de contención para jóvenes LGBTIQA+ estas no sustituyen el acceso a sistemas de salud mental formales, empáticos e informados. Aunado a lo anterior, es urgente entender que existen diferentes grupos dentro de la comunidad, las intersecciones de identidad (raza, edad, etnia, religión, discapacidad, ruralidad, nivel socioeconómico) que definen realidades y necesidades específicas dentro del colectivo; tomar en cuenta dichos factores nos permite entender mejor a cada población.
Comprender las experiencias y los desafíos únicos que enfrentan las personas LGBTIQA+ es importante para crear soluciones y entender cómo se combinan las diferentes características que hacen única a una persona. La falta de representatividad tiene consecuencias reales: sin datos no hay políticas públicas, ni programas de salud, ni recursos educativos que reflejen las vivencias del colectivo LGBTIQA+ en toda su diversidad.
Platanomelón México llama a la comunidad científica, instituciones públicas y privadas así como a agentes sociales a promover investigaciones con perspectiva de diversidad afectiva y sexual; incluir a la comunidad LGBTIQA+ en estudios clínicos, psicológicos y sociales; ampliar las fuentes de datos y cuestionar los modelos heterocentrados así como a escuchar al colectivo ya que sus vivencias son también evidencia.
Platanomelón México continuará creando contenido educativo, colaborando con expertos y visibilizando estas desigualdades, en pro de un futuro en el que la salud y el placer sean derechos universales, sustentados en datos reales, representativos y libres de prejuicios.