Budapest ya tiene a su «Miss Cirugía Plástica 2009», Reka Urban de tan sólo 22 años, “demostró” ser la mujer más bella con algunos arreglos.
El controvertido concurso de belleza pretende mejorar la imagen de este tipo de intervenciones estéticas en el país, informa el diario The Sun.
Según explicó el cirujano plástico Tamas Rozsos, se quiere demostrar que una mujer operada no tiene porqué resultar necesariamente artificial, y que los resultados pueden ser muy naturales.
Pueden participar mujeres que hayan pasado por el quirófano (no bastan las inyecciones de botox o colágeno).
La mayoría de las concursantes estaban operadas del pecho o la nariz, aunque también destacaron los liftings de cara. De hecho, debido a esta diversidad de intervenciones, el certamen contó con distintas categorías, como Mejor Implante de Pechos o Mejor Lifting.