Las actividades diarias de tus mascotas, tales como pasear al aire libre, retozar en cualquier superficie, y husmear objetos, animales y zonas que captan su interés, puede llenar de suciedad y patógenos sus prendas y su cama. Algunos pueden ser microscópicos o pasar desapercibidos, tales como pulgas y garrapatas. Si bien, esto puede ser limpiado mediante el cepillado o limpieza con productos especiales, es posible que no puedas retirarlos del todo.
Esta suciedad u organismos pueden transferirse a su ropa o cama generando condiciones ideales para que se reproduzcan. Para evitar esto, te presentamos 5 consejos de Luis Zuñiga, experto en lavandería de Mr Jeff, para que con un lavado apropiado y periódico de las prendas textiles y cama de tus peludos amigos, tu hogar y familia estén libres de cualquier agente biológico que pueda ser dañino para la salud.
- Las prendas o camas de tus mascotas deben separarse de tu ropa, además es aconsejable no utilizar los mismos utensilios (cubetas, jabón en pasta o lavadora) para lavarlos. Asimismo, debes revisar la etiqueta de la cama o prendas, y comprobar que el método de lavado propuesto por el fabricante es fácil y factible para realizarlo tú mismo.
- Antes de lavar, debes retirar la mayor cantidad de pelos que puedan tener las prendas mediante un cepillado enérgico, la aspiradora o con un sencillo rollo de papel adhesivo.
- Si la cama de tu mascota tiene manchas difíciles que no se removerán sólo con el lavado, lo más aconsejable es mezclar agua con jabón o algún producto desmanchador, y tallar con un cepillo. Como recomendación importante debes evitar productos con amoniaco, y usar vinagre blanco (100 ml) con bicarbonato (2 cucharadas) ya que la orina del perro, por ejemplo, contiene amonio y, por ello, estos productos podrían incitarlo ha hacer sus necesidades sobre su propia cama.
- Si bien puedes utilizar el mismo detergente y suavizante que utilizas para tu ropa, lo más recomendable es que busques en el mercado algún tipo de producto veterinario para hacerlo, o jabones marcados como neutros, esto evitará algún tipo de reacción alérgica o que concentre olores que no le gusten a tu mascota y ya no quiera utilizar la prenda o cama.
- Si vas a utilizar la lavadora o secadora, te recomendamos retirar todas las piezas metálicas o de plástico que puedan dañar el equipo, y seguir las recomendaciones del fabricante en cuanto a peso de la cama o prenda, y ciclos de lavado. Si a la cama de tu mascota se le pueden retirar las fundas, será mucho más fácil limpiarla, pero si no, lo que puedes hacer es sólo tallar la superficie con un cepillo y espuma de jabón para que el relleno se moje lo menos posible y dejarla secar al sol.