Una exclusiva cena, a la que acudieron diversos e importantes invitados, fue la manera elegida por el aclamado chef Enrique Olvera para presentar su «nuevo» Pujol.
El multipremiado restaurante ofreció un exclusivo menú para 50 privilegiadas personas en la nueva localización de la calle Tennyson 133 de la colonia Polanco, considerado uno de los mejores a nivel mundial y el mejor en nuestro país.
Olvera, embajador de la marca Mercedes-Benz, contó con el apadrinamiento de Radek Jelinek, director y presidente de la casa de la estrella en México, además de amigos cercanos.
La nueva sede abrió sus puertas para ofrecer detalles exquisitos a sus comensales, como la textura de las mesas de madera, el tono gris del piso de granito, el estacionamiento para bicicletas, el suelo hundido detrás de la barra para tener al personal a nivel de la vista de los clientes sentados, e incluso la distribución de la cocina.
El nuevo Pujol toma su inspiración de la arquitectura moderna de mediados de siglo; el comedor está lleno de luz y decorado con materiales sumamente simples. El espacio cuenta también con un
pequeño jardín rocoso que parecería un patio mexicano, la larga barra que atraviesa el lugar y
una ventana a lo largo de todo el comedor.
Fue así como el chef más importante y reconocido de nuestro país realizó un evento previo a la apertura de Pujol pocos días más tarde, luego de presentar hace algunos meses con la presentación del Clase E.