La casa suiza Jaquet Droz ha logrado unir, de manera armoniosa y magistral, la más alta tecnología con la tradición artística de la Ilustración, para regalarnos un novedoso y encantador reloj.
Se trata del Charming Bird, la última pieza de una edición limitada que fuera lanzada hace ya 3 años y cuyo atractivo es el curioso y casi perfecto trabajo de reproducción del canto de los pájaros.
Bajo una cúpula de zafiro, que ocupa la mitad inferior de la esfera del guardatiempos, se alza un bonito pájaro de llamativos colores.
El preciso y original mecanismo se activa cuando el reloj marca las 2, comenta el sitio RobbReport, momento en que el ave comienz a moverse y emitir una amplia gama de sonidos.
¿Cómo es posible? Sencillo: gracias a unos diminutos tubos de cristal que actúan como esqueleto del pájaro, almacenando y transportando una pequeña cantidad de aire comprimido a través de pistones de carbono, lo que determina el canto del pájaro.
Además, el nuevo Charming Bird de Jaquet Droz está decorado con madreperla, un material precioso grabado y pintado a mano, que se puede conseguir en dos colores diferentes y en edición limitada a ocho ejemplares de cada modelo.