El heredero a la corona británica, el príncipe Carlos y su esposa, Camilla Parker Bowles, han viajado a Ecuador y más concretamente a las maravillosas islas Galápagos. Allí, vieron de cerca la tortuga gigante Jorge.
Este animal es único en su especie y, de acuerdo a los cálculos de los expertos, tiene alrededor de 120 años. Se encuentra en el parque de la Fundación Charles Darwin en la isla galapagueña de Santa Cruz.
Hasta allí fueron el hijo de la reina Isabel II y la condesa de Cornualles. El padre de los príncipes Guillermo y Enrique se quedó unos diez minutos observando al solitario y lento animal. Luego apadrinó una cría galápago, a la que llamó, igual que a su primogénito, William.