Sería facilista utilizar el chiste de que «hay que ser mago para pagar eso», aplicado a los 57 mil dólares que vale alquilar la isla del famoso ilusionista David Copperfield.
Sin embargo no deja de ser real el precio que deberemos desembolsar si pretendemos rentar Musha Cay, la isla privada ubicada en las Bahamas meridionales propiedad del mago estadounidense.
Copperfield pagó unos 50 millones de dólares por el islote, a lo que debió sumar otros 40 millones en obras de remodelación y en la compra de otras pequeñas islas en las inmediaciones, para convertirlas en «Bahía Copperfield».
Musha Cay, o Cayo Musha, está considerada la isla-resort más exclusiva del mundo, contando con arenas blancas, naturaleza exótica y aguas cristalinas en un entorno paradisíaco.
Musha Cay puede albergar a un máximo de 24 huéspedes en esta isla privada, quienes pueden elegir entre quedarse en la enorme casa principal de casi 1,000 metros cuadrados en la cima de una colina, o en una de sus casas de playa con techos de paja, asegura el sitio Megaricos.
El resort también ofrece la opción de dos villas para invitados, cada una con dos habitaciones, jacuzzis al aire libre y playa privada, o bien una villa de cinco habitaciones al lado de la playa.